Tras los momentos de angustia que sufrieron los Duques de Sussex la noche del martes con los paparazzi, un icónico momento pasó inadvertido.
Este 16 de mayo, el príncipe Harry y Meghan Markle encendieron las alertas al verse envueltos en una inesperada persecución de autos que los llevó incluso a cambiar de vehículos, y que pudo haber terminado en una "catástrofe", tal y como ocurrió con Lady Di.
Sin embargo, horas antes la esposa de Harry había acaparado los reflectores al ser reconocida en el evento ‘Women of Vision Awards 2023’ y se convirtió en la gran protagonista de la ceremonia en Nueva York, Estados Unidos.
Se trató así de la vuelta a escena pública de la ex royal que asistió a la deslumbrante gala acompañada de su madre, y de su esposo, que aparecieron juntos desde la polémica coronación del rey Carlos III (a la que ella no asistió).
Deslumbrante con su ‘glam look’
Sin perder el estilo, y derrochando glamour, la flamante esposa del hijo "incómodo" del monarca de Inglaterra sorprendió al lucir un entallado vestido dorado straples, sin mangas, y una sutil abertura en la pierna, acompañado de un exclusivo par de sandalias.
Su vestido marcó una clara salida del protocolo de la realeza, el cual quedó definido desde el primer día en que, junto a su marido, decidieron alejarse de los roles reales, y la Duquesa optó por renovar su guardarropa.
Y no solo eso, pues con este revelador outfit, le habría enviado un fuerte -y oculto- mensaje a la Familia Real: el rey Carlos, la reina Camilla y los príncipes de Gales.
Lo que para muchos significó es que la celebridad estadounidense envió un mensaje directo y contundente al demostrar que no trata de seguir las reglas de los “royals”: dejó atrás los colores neutros que se acostumbran para no "destacar".
Con ese tono metálico y brillante, la ex actriz de “Suites” habría hecho un “guiño” a su pasado y deslumbrar como toda una estrella de Hollywood.
Emotivo discurso
La mamá de Archie y Lilibet fue reconocida en la gran noche como una mujer feminista defensora de la equidad de género y de los derechos humanos.
Así, radiante y muy emocionada, la cuñada del príncipe William y Kate Middleton recibió el premio de manos de Gloria Steinem, ícono feminista y además, su amiga.
“Soy una mujer que sigue inspirada y motivada por esta organización (…) Me permitió reconocer que parte de mi gran valor y propósito en la vida era abogar por aquellos que se sentían ignorados, enfrentar la injusticia y no tener miedo de decir lo que es verdad, lo que es justo y lo que es correcto”, expuso la aristócrata de 41 años ante los asistentes.
“Nunca es demasiado tarde para comenzar (...) Puedes ser la visionaria de tu propia vida. Aún hay mucho trabajo por hacer”, puntualizó la duquesa.