La tensión en el Palacio de Buckingham es cada vez más fuerte, la polémica relación entre Kate Middleton y el príncipe William hoy acapara los reflectores y son los protagonistas de los titulares de medios británicos.
Y es que en medio de una evidente crisis matrimonial, y a solo unos días de la coronación oficial del Rey Carlos III prevista para el próximo 6 de mayo, mucho se especula sobre las medidas para evitar algún escándalo en la Familia Real.
Ante los recientes rumores de supuesta infidelidad por parte del William, la princesa de Gales no quiere que su imagen resulte dañada, y se ha revelado que estaría preparando una estrategia.
La pareja real que ha buscado a toda costa contrarrestar la controversia, no escapa del ojo público y así se dejó ver en los pasada entrega de premios BAFTA, aunque sin convencer a sus seguidores, ¿fingían?.
Si bien, Kate se ha distinguido por su carisma y sus modos correctos, la mediática situación podría salirse de control hasta llevarla a reaccionar en su defensa, por lo que buscaría resguardar su integridad y la de su propia familia.
Las especulaciones tomaron fuerza luego de que el 14 de febrero Harry lo habría celebrado con Rose Hanbury, - su supuesta amante- a quien además le habría regalado una costosa joya.
En tanto la esposa del primogénito de la fallecida Lady Di había revelado varios días antes de forma discreta que no haría nada en San Valentín, debido a que el heredero a la corona ya no era detallista - ni amoroso- con ella, sus palabras resultaron ser “una bomba” para la prensa mediática.
Presuntamente, Kate habría visitado un puesto de flores de “Neil Ashcroft”, en Kirkgate Markety y tras contarle al vendedor del negocio que muy pocas veces recibía bonitos detalles de parte del nieto de la reina Isabel, el florista le obsequió un enorme ramo de rosas.
Las confesiones que hizo la cuñada del príncipe Harry y Meghan Markle en la florería al dejar entrever que no recibiría ningún detalle -ni flores-, no hicieron más que alimentar el rumor de su separación.
Los padres de George, Charlotte y el pequeño Louis, enfrentan un momento difícil que desataría efectos colaterales en la corona británica.
Todo indica que la princesa de 41 años no se quedará callada y podría utilizar su carácter público para revelarse en contra de la familia británica y el futuro monarca. ¿Qué es lo que planea Kate Middleton?