Ante la partida de la reina Isabel II el pasado 8 de septiembre, parece que no logró poner en orden algunas situaciones familiares, pues desde que Harry y su esposa Meghan Markle decidieron separarse de la familia real en 2020, hubo algunos desacuerdos para la monarca.
La soberana de Inglaterra dio su último respiro en el Castillo de Balmoral, Escocia, su lugar favorito para descansar. Y aunque Isabel murió pacíficamente en su recinto preferido, lo cierto es que su familia arrastra varios escándalos y polémicas de tipo personal que hasta ahora no tienen solución.
Según el libro “The New Royals - Queen Elizabeth’s Legacy and the Future of the Crown”, la autora Katie Nicholl dio a conocer el sentir de la reina sobre la ruptura de su nieto Harry con la monarquía y como consecuencia el no poder convivir con sus bisnietos Lilibet Diana y a Archie.Según la autora, la reina estaba muy triste por la decisión del príncipe, hijo menor de Diana de Gales.
La publicación señala que la reina Isabel II estaba profundamente decepcionada y lamentó que durante sus últimos años no pudo ver a los bebés. La última oportunidad que ella tuvo para convivir con toda su familia, fue en una fiesta en Sandringham de la cual declinaron la invitación Harry y Meghan.