Pese al disgusto de la familia real de Reino Unido por abordar su historia en The Crown, la serie acaba de estrenar su quinta temporada con gran éxito sin importarle la molestias existieron de los más longevos de la dinastía.
Resulta que Felipe de Edimburgo, esposo de la reina Isabel II, quien falleció en 2021 a los 99 años, también quedó afectado por el retrato de su familia que la producción escrita por Peter Morgan plasmó. El desagrado del royal fue tal que pasó por su cabeza demandarlos.
Según fuentes cercanas, el padre del rey Carlos III, enfureció durante la segunda temporada, cuando se abordó su historia como una dura vida en su adolescencia, al venir de una familia real derrocada en territorio griego, además de sugerir sus nexos con los nazis debido los casamientos de sus hermanas.
Particularmente, Felipe se enojó por las escenas en las que se refieren a la muerte de su hermana Cecilia. Según la ficción, la mujer hizo un viaje a Reino Unido en avión pero ocurre un fatal accidente que le arrebata la vida junto con su esposo e hijos. Asimismo, la historia muestra que el padre del príncipe, Andrés de Grecia y Dinamarca, lo culpa a él por la tragedia.
Felipe de Edimburgo se sintió triste y decepcionado por esa temporada, ya que las cosas no fueron así, es por eso que decidió consultar a su bufete de abogados, Farrer & Co., pero finalmente decidió dar un paso atrás y no demandar a la serie.
Felipe no era el único miembro de la familia real que ha quedado inconforme con The Crown; su nieto William también señaló que el proyecto de Netflix afecta directamente la imagen de su estirpe conforme van avanzando los capítulos. Esta última entrega cuenta el escandaloso divorcio de sus padres, Diana y Carlos, así como una reina Isabel que no es querida por el pueblo y la tachan de “obsoleta” y “pasada de moda”.