Si algo va a sobrar en los próximos meses para la cartelera de cine, eso será el color rosa fosforescente y el brillo al que nos tiene acostumbrados Barbie. Y es que falta cosa de un mes para que millones de seguidores vean convertido en realidad lo que durante muchos años fue sólo un sueño: un live action de la popular muñeca.
La directora y su equipo han cuidado hasta el más mínimo detalle de la película que adapta al live-action a la preciada muñeca de Mattel. Después de desvela todos los secretos de la arquitectura de la obra, Gerwig reveló que hasta se había agotado el color rosa de todas partes para que el filme fuera lo más fiel posible al personaje original: "El mundo... se quedó sin rosa".
"Usaron toda la pintura que teníamos": los encargados de Rosco no sabían qué hacer a la hora de satisfacer las necesidades de rosa fluorescente con los que Greta Gerwig quería llenar desde el suelo hasta las farolas de 'Barbie'.
"Todo tenía que ser tangible porque los muñecos son, sobre todo, cosas que tocas. No quería olvidar lo que me hizo amar a Barbie cuando era pequeña", decía Gerwig en una pasada entrevista.
"Quería plasmar lo que era tan ridículo de las Dreamhouses", añadía la cineasta. "¿Para qué bajar por las escaleras si puedes deslizarte a la piscina? ¿Para qué subir escaleras si puedes coger un ascensor a juego con tu vestido?".
Además, la diseñadora Sarah Greenwood y la decoradora Katie Spencer afirmaron que el diseño que se ha buscado para la casa de Barbie busca representar "la casa de una mujer soltera" y "el icono feminista definitivo". Barbie es mucho más que una simple comedia, el equipo creativo del largometraje ha hecho lo imposible para que la cinta tenga un fondo muy importante.