Desde hace algunos años, Shaila Durcal, la hija de Rocío Durcal, llamó la atención por ganar un poco de peso, debido a problemas de salud, sin embargo, hace tiempo reconoció que el tema se le salió de las manos y hubo un punto 'sin retorno' para ella, pues no podía perder esos kilitos de más con nada.
Hasta que se cansó de sentirse fatigada y 'pesada' y decidió poner manos a la obra, aunque nada ha sido resultado mágico o milagroso y Shaila siempre se ha asesorado con expertos para no provocarse un desorden, ahora los resultados son más que evidentes, pues la hija de la famosa cantante española suma ya más de 20 kilos menos.
Como era de esperarse, Shaila ha sido cuestionada por el método que la hizo lograr su objetivo, y ella compartió las claves de su pérdida de peso sin dejar de recordar que cualquier cambio de régimen alimenticio o dieta, debe ser supervisado por un experto en nutrición para evitar poner en riesgo la salud.
El secreto, según Shaila fue llevar una dieta muy baja en niveles de grasa, combinada con ejercicio físico, conocida como 'cetogénica' en el mundo de los nutriólogos.
En este tipo de dietas se mantiene la cantidad de carbohidratos muy controlada y se reduce el consumo de grasas, lo cual permite que podamos perder grasa de forma generalizada sin que esto pueda afectar al músculo. Cuando lo hacemos, lo que conseguimos es cambiar el funcionamiento de nuestro metabolismo y nuestro propio cuerpo comienza a generar cuerpos cetónicos a partir de la grasa, que se convierte así en el motor que ayuda a nuestro cuerpo a funcionar. En otras palabras: nuestro organismo consume grasa para poder generar energía.
Shaila Dúrcal ha llevado a cabo este tipo de dieta en dos fases distintas. En primer lugar, los primeros 21 días se lleva a cabo una dieta baja en grasas. A partir de ahí, en un proceso de adaptación metabólica, se introducen de forma gradual los grupos de alimentos.