Luego del sonado interrogatorio que hizo Camille Vazquez a Amber Heard, uno de los temas más polémicos del juicio ha quedado totalmente aclarado. Se dijo hace unas semanas que la actriz había defecado en la cama de Johnny Depp, más tarde, trascendió que ella habría reconocido su responsabilidad y que todo habría sido parte de una broma que se salió de control, sin embargo, ahora de viva voz, la actriz negó rotundamente haberlo hecho e incluso responsabilizó a la mascota de Depp de ello.
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Durante su testimonio, Amber Heard declaró que el Yorkshire Terrier de Johnny Depp, llamado Boo fue quien defecó sobre la cama del actor, debido a que presuntamente habría comido por accidente cannabis del actor. Amber enfatizó en que el pequeño animal habría quedado lastimado de su sistema digestivo de por vida por tal incidente, por lo que era usual que ocurrieran esa clase de 'accidentes'.
“‘Boo había comido la hierba de Johnny cuando era un cachorro y tenía problemas de control intestinal”, dijo. Además, puntualizó sobre el rumor de que todo se había tratado de una broma para su ahora ex esposo.
“No hice ninguna broma, no lo encuentro gracioso... no entiendo por qué una mujer adulta lo haría. Mi vida se estaba cayendo a pedazos, no estaba para hacer chistes”, sentenció Heard.
De acuerdo con Johnny y su defensa legal, los hechos habrían ocurrido la noche del cumpleaños de Amber, cuando celebró sus 30 años y él llegó tarde a la fiesta debido a que tuvo que atender a sus abogados por una fuerte suma de dinero que faltaba en sus cuentas.
La defensa legal del actor insiste en que el excremento pertenecía a la ex mujer de Johnny, debido al tamaño que presentaba, algo imposible de hacer por un perro de raza tan pequeña como lo es el Yorkshire Terrier.